Estrategias narrativas para informar del pasado en la novela "Beloved"


Toni Morrison.

Beloved

Debolsillo, 2013.

Traducción de Iris Menéndez.


Por Sonsoles García-Albertos.

El propósito de este trabajo es exponer el esquema temporal de la novela Beloved y a partir de él, analizar en el primer capítulo los distintos mecanismos que utiliza Toni Morrison para introducir información del pasado en el discurrir de la historia que se cuenta en el presente narrativo. Se ha elegido este capítulo porque en él hay ejemplos variados y porque se ha considerado que resulta más inteligible este trabajo y el esquema que lo acompaña ciñendo la historia en el presente narrativo a un espacio de tiempo limitado.

A lo largo de la novela tenemos dos líneas temporales. La historia del presente narrativo arranca en 1873, abarca unos dos años y se desarrolla siempre en forma lineal. La historia del pasado narrativo se ha delimitado entre 1848 (año de la llegada de Sethe a Sweet Home) y algo después de 1862 (Denver va al colegio y después, sin que lo podemos acotar con precisión, Baby Buggs muere). La narración regresa a momentos anteriores, como el nacimiento de Sethe o la historia de Baby Buggs antes de la llegada de Sethe a Sweet Home, y se relatan también hechos posteriores, sobre todo acontecidos a Paul D. Sin embargo, se ha preferido acotarla así porque los hechos que se sucedieron entre 1849 y 1862 cuentan de manera fragmentaria una historia convencional de planteamiento, nudo y desenlace de manera que los saltos a antes y después se pueden considerar regresiones y anticipaciones de esa narración en el pasado.

La historia del pasado narrativo no se cuenta de manera lineal, sino que se va desvelando a lo largo del desarrollo de la historia del presente de manera desordenada en la línea temporal. Gráficamente:



Se han representado las dos líneas temporales y su relación entre ellas. Cada flecha de salida hacia el pasado narrativo tiene su flecha de retorno en el mismo punto, es decir, en esta novela siempre se vuelve al instante de la historia presente del que se partió, independientemente de las anticipaciones y regresiones que pueda haber en el interior de cada salto al pasado. También hay que señalar que en muchas ocasiones se vuelve al mismo instante del pasado desde diferentes momentos del presente narrativo.

El esquema del capítulo uno que se analiza en este trabajo es conceptualmente idéntico al que se ha presentado para la novela completa. La diferencia es que la línea temporal del presente (azul) no abarca dos-tres años sino un fragmento de un día de 1873.

Básicamente en esta novela hay tres formas de dar a conocer el pasado de una historia dentro de otra:

-          Diálogos en los que los personajes hablan del pasado: Esta opción está disponible con narradores en primera y en tercera persona y con cualquier grado de omnisciencia. Tiene lugar en el presente narrativo.

-          Personajes que recuerdan el pasado de manera individual. Esta opción, en un narrador en primera persona, está limitada al personaje – narrador. Con un narrador en tercera, será coherente según la distancia del narrador al personaje o personajes. Tiene lugar en el presente narrativo.

-          Flashbacks o regresiones: Las regresiones las puede hacer un personaje (con narrador en primera o en tercera) o incluso el narrador cuando es omnisciente, como es el caso de esta novela. El tiempo narrativo se traslada al tiempo de la regresión.

A continuación, se analizarán las distintas formas de aportar información sobre el pasado que aparecen en el primer capítulo en el orden que aparecen en el texto, es decir, de manera secuencial según el presente narrativo. El siguiente gráfico resume este análisis:



Las flechas en azul son regresiones, las flechas en verde recuerdos y las flechas en rojo diálogos. Sobre cada flecha está el número que le corresponde a ese salto al pasado en la siguiente enumeración, el elemento que se utiliza como nexo temporal (cuando procede) y entre paréntesis el número de página.

1.      En las primeras líneas el narrador nos informa de que en 1873 sólo Seth y Denver vivían en el 124 y rápidamente nos cuenta algunos datos de porqué esto ha llegado a ser así. Se trata de una regresión de casi cuatro páginas (17-20) y dos páginas de un personaje recordando (21-22) sin pasar explícitamente por el presente narrativo. En cierto modo, se puede decir que es una regresión del personaje casa, ya que lo que le da unidad de contenido es que todo lo que se cuenta se relaciona con el hecho de que el 124 tenga un fantasma:

“[...] los hijos, Howard y Buglar, se largaron al cumplir los trece años... en cuanto bastó con mirar un espejo para que se hiciera trizas.” (Página 17)

“Cada uno de ellos huyó al instante... en cuanto la casa porfirió el único insulto que para ellos [...]” (Página 17)

“Lo que le extrañó (a Baby Suggs) fue que sus nietos hubieran tardado tanto en darse cuenta de que las demás casas no eran como la de Bluestone Road” (Página 18)

Después de la partida de los hijos, se nos relata la muerte de Babby Suggs y Denver y Seth hablan del espíritu. Ahora es a través del fantasma de Beloved que se crea otra regresión en el texto, en esta ocasión al entierro de Beloved. Se trata de una regresión dentro de la regresión:

“—No más potente que el amor que yo sentía por ella —respondió Sethe, y una vez más todo se hizo presente.

El fresco acogedor de las lápidas sin escoplear; la que eligió [...]) (Página 19)

Sigue utilizando de nexo temporal a Beloved (y también la casa, que es el concepto común de toda la regresión) y, con el narrador a muy poca distancia de Sethe, el texto se traslada a una conversación de Sethe con Baby Suggs que tuvo lugar entre el entierro de Beloved y la marcha de los hijos:

“No sólo tuvo que pasar el resto de esos años en una casa paralizada por la ira de la criatura que vio su cuello cortado, sino que los diez minutos que pasó apretada [...]) (Página 20)

En esa conversación, Baby Suggs habla de los hijos que apenas recuerda, y es este concepto del recuerdo casi borrado que transforma la regresión en un recuerdo de Sethe y nos devuelve al presente narrativo:

“(Baby Suggs) Todo lo que recuerdo de ella es cuánto le gustaba la costra quemada del pan.” (Página 21)

“Los chicos habían huido perseguidos por la muerta y su recuerdo (de Sethe) de Buglar se esfumaba rápidamente. Al menos, la cabeza de Howard tenía una forma que nadie podía olvidar.” (Página 21).

Este recuerdo lleva a Sethe a lo que no quiere rememorar, pero recuerda la manzanilla: “Y mientras quitaba la manzanilla con agua de la bomba y con trapos (en su huida)” (Página 21).

El recuerdo concluye cuando se le acaba la manzanilla en el presente narrativo: “Cuando desapareció hasta el último vestigio de manzanilla, dio la vuelta hasta el frente de la casa, recogiendo los zapatos y las medias por el camino” (Página 22)

Este primer bloque de información sobre el pasado es el más complejo de todo el capítulo. Utilizando como elemento común la casa, se inicia con una regresión que contiene otras dos regresiones y que concluye al transformarse en recuerdo de un personaje.



2.      Tras un diálogo entre Sethe y Paul D, recién aparecido. Reproducen el mismo esquema de coqueteo con el que se hablaban en Sweet Home, y eso provoca recuerdos en Sethe:

“—Tienes buen aspecto.

—Así confunde las cosas el diablo Me deja tener buen aspecto mientras me sienta mal. —La miró y la palabra «mal» adquirió otro significado.

Sethe sonrió. Así eran... así habían sido ellos. Todos los hombres de Sweet Home, la trataban con un leve coqueteo fraternal [...]” (Página 23)

Halle aparece en el recuerdo y eso le lleva a Sethe a preguntar de él. Entonces se inicia un diálogo en el que Sethe informa a Paul D de algunos detalles de lo que le aconteció tras la huida. Algunos ya eran conocidos por los lectores; otros no:

“—Casi sola. Pero no del todo. Me ayudó una blanca.” (Página 23)

En este caso, al ser un diálogo, volvemos a ocuparnos del presente porque Sethe cambia el tema de conversación:

“—En ese caso también se ayudó a sí misma, Dios la bendiga.

—Podrías quedarte a pasar la noche, Paul D.” (Página 24)



En sólo siete páginas ya hemos encontrado muestras de las tres maneras indicadas para aportar información del pasado narrativo.



3.      Cuando Paul D entra en la casa y percibe que está hechizada, los ojos de acero de Sethe provocan que Paul D, empujado por un recuerdo, regrese a una conversación que tuvo con Sethe una vez que Halle había huido. Este es el momento exacto en que se inicia la regresión:

“La mujer de Halle. Todos los años embarazada, incluido aquel en que se sentó junto al fuego para contarle que iba a huir”. (Página 25)

Toda la regresión está atravesada por el acero de los ojos de Sethe, y es este mismo elemento el que se usa para la vuelta al presente narrativo:

“Ahora el acero había retornado, pero el rostro suavizado por el pelo le hizo confiar en ella lo suficiente para cruzar la puerta justo en medio de una fuente de ondulante luz roja.” (Página 26)



4.      Después de que Paul D atraviese la luz roja, hablan del presente. Entonces Sethe le cuenta que cose y a partir de ahí, utilizando la costura, tenemos una nueva regresión en la que el narrador, a muy poca distancia de Paul D, nos lleva de nuevo a Sweet Home, esta vez al primer año de Sethe allí.

“—Cocino en un restaurante de la ciudad. Y coso un poco a hurtadillas.

Entonces Paul D sonrió, recordando el vestido que se había hecho para la cama. A su llegada a Sweet Home, Sethe tenía trece años.” (Página 27)

Como en la regresión del epígrafe anterior, un recuerdo actúa como lubricante temporal para trasladar el tiempo narrativo del presente al pasado. Pero narrativamente, el recuerdo es apenas un instante dentro del texto.

La vuelta al tiempo presente en este caso se hace de manera brusca por medio de una interrupción dialogada de Sethe:

“Escogió a Halle y para la primera encamada se cosió un vestido a hurtadillas.

—¿Por qué no te quedas un tiempo? Nadie puede recuperar dieciocho años en un día.” (Página 28)

A pesar de que la salida de la regresión se hace por la interrupción, Morrison cierra el pasado volviendo a la costura.



5.      Aparece Denver y se recuerdan algunos hechos de su infancia intercalados con diálogos sobre el pasado y el fantasma presente entre ella, Sethe y Paul D. No se representa en el gráfico para no complicar su compresión, ya que narrativamente se trata de un modo simple de recuerdo.



6.      Sethe calma a Denver y la lleva a otra habitación. Se pone a preparar una masa y la comida la hace pensar en su propia leche. Entonces, en un diálogo, le cuenta a Paul D que le robaron la leche. El diálogo concluye por la acción que se desarrolla a continuación, que es que Paul D le toca los pechos a Sethe.

“Diestramente la mezcló con la harina y, salpimentando el agua con la mano izquierda, formó la masa.

—Yo tenía leche—dijo—. [...]” (Página 35)



7.      Antes de finalizar el capítulo Paul D recuerda su cautiverio en 1856. En aras de la comprensibilidad del gráfico, no se ha representado.



A lo largo de este trabajo se han mostrado los distintos mecanismos narrativos utilizados por Toni Morrison para aportar información sobre el pasado de la acción principal en la novela Beloved. Se ha identificado el detonador de los saltos en el tiempo (tanto hacia adelante como hacia atrás) y se ha ejemplificado cómo las tres estrategias citadas (diálogo, recuerdo y regresión) pueden combinarse entre ellas. Para ello se ha utilizado el primer capítulo de la novela Beloved, que comparte estructura con el resto del libro.


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